El amor duele. El amor puede que sea una de las heridas más profundas que te hayan hecho y la que más tarde en cicatrizar.
Algunos dicen que el amor es simple, querer o no querer, punto. Yo digo que quien dice eso no ha conocido el amor en su vida. El amor es complicado, es egoísta, es independiente y a la vez necesitado. Es de todo, menos simple.
Hay muchos tipos de amor, por no decir demasiados. Y a veces, se confunden. Esto no trae más que quebraderos de cabeza, inseguridad y canciones tristes que escuchar para hundirte más en el dolor.
Las personas somos egoístas por naturaleza, buscamos una media naranja que termine de completarnos, de llenar ese vacío que sentimos cuando sabemos que nos falta algo. Ese algo. El problema es que la mayoría de las veces nos equivocamos. Y entonces, solo entonces herimos y nos hieren. Cruelmente.
Un día, sin tu esperarlo, entra en tu vida ese alguien, una persona que no conoces, o que sí, pero nunca lo suficiente como para sentir algo. De pronto, toda tu vida parece menguar. Entra en tu vida, pone patas arriba tus sentimientos y enseguida tu corazón está en manos de otro. No sabes como ha ocurrido pero es un hecho. ¡Y ni siquiera te has dado cuenta!
"No pasa nada" piensas, mientras disfrutas del momento. El amor ciega y tú te has quedado ciego de repente.
Hasta que algo ocurre. Esa persona se ha cansado de tu corazón y de golpe te lo tira a la cara o directamente al contenedor de basura. No lo necesita más. Se ha cansado. O simplemente puede que haya confundido el tipo de amor. Y es entonces, cuando tú te rompes por dentro. Porque el tipo de amor que tú sentías si era ese. El más peligroso de todos. Porque casi inconscientemente en tu cabeza habías planeado todo un futuro juntos. Y duele.
Duele porque te das cuenta de que has estado viviendo una fantasía, porque ese futuro solo existía en tu cabeza.
Otras veces, a pesar de haber encontrado a la persona adecuada, el amor sigue siendo difícil. Muy difícil. La convivencia cambia las cosas y los sentimientos. Los años y la costumbre pasan factura. Es un amor que ya ha madurado y se ven las cosas desde otra perspectiva. Está la seguridad de que conoces a la persona, de que os entendéis y respetáis. Pero a veces todo pende de un hilo, y lo que antes él adoraba de ti, ahora lo aborrece y viceversa. Hay baches en todas partes y hay que saber esquivarlos.
El amor duele, deberían enseñarnos eso desde niños. El amor no es fácil. El amor, hay que currárselo.
Pero el amor también puede ser la cosa más maravillosa del mundo. Algo por lo que realmente merece la pena luchar. Y a veces, solo a veces, da igual cuánto hayas vivido y cuántas veces te hayan roto el corazón o cuántos hayas roto tú. Porque supongo que lo que realmente importa es haber compartido tu vida con quien quieres. Única y exclusivamente. Como decía, es egoísta.
1 comentario:
Que entrada tan bonita, el como tu dices el amor puede ser algo maravilloso aunque hay veces que las cosas son complicadas, egoístas y casi imposibles.
besos,
la chica de las gafas
Publicar un comentario